Crítica sobre la exposición del artista peruano Fernando Szyszlo en 1951, tras su regreso de Europa. Se destaca su evolución hacia una pintura abstracta, dejando atrás el realismo, y cómo su obra genera tanto controversia como admiración. Se resalta su búsqueda de una expresión artística auténtica, influenciada por el arte precolombino y la modernidad.